Aquí estoy un año más ¡y ya son 4! Los años pasan muy deprisa.
Se puede decir que ya no soy una "novatilla" y desde el primer mes de ingreso supe que la idea ya no era sólo estudiar que la palabra
aprender tomaba otro significado más importante (por la cuenta que te trae) y eso requería mi máxima atención. Con ello, mis intenciones de este año siguen siendo las mismas que otros, aprender, mejorar y por supuesto disfrutar de ello.
Me considero una estudiante trabajadora e incansable (hasta que el cuerpo aguante) aunque es verdad que de vez en cuando también me resbalo, pero sé que la constancia es esencial. A veces demasiado espontánea y otras demasiado tímida. Expresarme, mi punto negativo y en el que tengo que poner todas mis fuerzas, siempre soy un batiburrillo de ideas sueltas que me cuesta encajar en el puzzle. Encima si a eso le añadimos mi cabezonería, no paro hasta entender porque no vale lo planteado... teneís a la mismisima Amalia, inconfundible por su nerviosismo.